Escucho una canción, que sabe a tu perfume
Que se esconde en mi falda,
Como pájaro en árbol
En brillantes despertares
Cuando gallos anuncian amaneceres
En los verdosos campos de los años dorados
Y no me preguntes cómo, ni porqué
(Las preguntas dejámelas a mí)
Se percibe un viento que proviene del sur
Que ha volado mis tormentos
Recuerdo noches, despierta deambulante
en vano espantando esos pesares.
Escucho una canción con un estribillo tímido
De pocas voces-casi sin coros-
Que te nombra
Dulcemente se acomoda en mis oídos
Y ahí se detiene
Se queda danzando sobre mi boca
Que ansiosa
Te pronuncia
Hermosa canción
Virgen en mi memoria
conquista mi alma
Hasta embriagarme
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3 comentarios:
el amor, tan dulce, rosado, luminoso, dulce y bucolicamente apacible.
Yo estoy del otro lado, del lado oscuro, la soledad, el anhelo, la noche, el ansia, el deseo y la pasion no correspondida.
Val, hermoso el poema, qué lindo! Y de paso te digo que allá en mi orilla te dejé algo, cuando quieras pasá a buscarlo. Un abrazo y buen fin de semana.
pero que manera de humedecer el monitorrrrrrrrrrrr!!!!!!!!
oh la la oh la la!!!
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