domingo, 29 de junio de 2008

Parte II

Termina la canción. Y vuelve en sí. Vuelve a su estado original, como una especie de “metamorfosis”. Enciende un cigarrillo, haciendo de cada bocanada de humo, un suspiro por algo que desea y que falta…

Mira el reloj, apaga las luces de su habitación y se va a dormir.
Otro amanecer la espera…aunque ella, no quisiera despertar por un tiempo-al menos mientras perdure esta tristeza que la bebe y la consume-.


Verónica cumple su rutina de trabajo, “conectada” a su “música ambulante” en una mera desconexión y deseado escape--acto que repite también al regresar a su hogar-.
Piensa, entre la hora de almuerzo y algún café que bebe, en personas que tal vez, de alguna manera le “roban” algo su pensamiento; esto le suele quitar una sutil sonrisa, aunque sepa que no existe interés alguno en abrirse al amor.

De regreso a su hogar, su teléfono sonando…y la voz de su mejor amigo. Aquél que logra diluir algo su angustia. Quedan en tomar un café por la noche. Él dice necesitar hablarle.
Ella, sin dudarlo, acepta.
Es su amigo,y gran confidente. No puede permitirse un NO, como respuesta.



Son las 20.00 Hs. Del día Lunes; El, de postura firme, y con la seriedad que lo caracteriza, la espera en un Bar del microcentro porteño. Estaba junto a la ventana, mirando la “nada”, con su mirada perdida.
De lejos, se oyen unos tacos resonar, El reconoce ese andar, y cuando gira su torso en dirección al sonido; ahí estaba Ella. Con su look algo “hippie”- como el lo ha caracterizado, aunque Ella no se haga cargo en lo absoluto de ello-.

Piden dos cafés, y en el clima de confianza, amigable, cordial y ameno que mantienen hace tiempo, comentan su jornada-interrumpe la moza del lugar, trayendo a la mesa el pedido-, cuando Verónica pregunta: ¿En qué estábamos Fernando?
-Él, pícaro, sonríe- y le dice: En que te cité para hablar de algo.
-Bueno dime. ¡Qué es lo que pasa!?¿Vas a tenerme así intrigada?. Ya sé, no me digas nada.-Verónica se adelanta a los hechos, con la ansiedad que la caracteriza y responde rápidamente por él, como si supiera el motivo de dicha cita-: Hay alguien que te está quitando el sueño. Lo sé...Intuyo que alguna falda anda por ahí… (Ríe a carcajadas).
-No, no es eso Vero….Bah, en realidad sí, pero no es lo que crees.
- ¿Entonces?. No entiendo…-
Fernando no deja terminar que ella continúe indagando.
Me están pasando cosas con vos. Eh….., no sé si debo decirte esto-dice él-
- no entiendo nada Fernando-replica Verónica-
- Bueno está bien. Seré más claro. Desde que nos conocimos que hemos tenido conexión, al punto de generar una linda relación de amistad entre ambos. Sé que soy tu confidente, y que hay un aprecio mutuo. Pero desde hace algún tiempo (precisamente desde que has terminado tu última relación), que te siento de otra manera y sinceramente, me cuesta mucho “verte” con ojos de amigo. Pienso a diario en vos, me dan celos saber que alguien te interesa y en cada salida que compartimos no soporto que tampoco alguien se interese en vos. Me da algo de rabia sentirme así, y esto nunca me había pasado en el tiempo que somos amigos.

Fernando habla de manera verborrágica, como si estuviera conectado a un cable y recibiera algún tipo de electricidad. Así se lo percibe: “eléctrico”.

Verónica, comienza a enmudecer. Queda “muda” de palabras, acciones y reacciones. Empalidece, desconcertada por la situación.

El concluye diciendo:” no hace falta que digas nada ahora. Sé que no esperabas esto, y no quiero generar en vos ningún tipo de incomodad ni presión
No quiero perderte como amiga, pero Te amo, esa es la verdad”.

Ella siente un escalofrío que atraviesa su cuerpo, y sus ojos, se humedecen poco a poco, deslizándose minutos más tarde lágrimas que corren su rimel negro y mojan algo su remera…

Sollozando, le dice: “No te disculpes por esto. Nada va a perderse. Si te parece, tal vez sea lo mejor, tomar algo de distancia, a modo que vos te tranquilices y pienses mejor todo esto”.Ahora será mejor que cada uno descanse y se tome su tiempo para pensar…

“Está bien. De todas formas, no tengo nada que pensar. Sé que te amo y hace tiempo no sentía tan bonita sensación por una mujer. Pero respeto este tiempo”.-acota Fernando-.

Salen del Bar, apenas sin mirarse. Ella lo abraza tímidamente. El detiene sus ojos en los de Ella y repite:” no quiero perderte Verónica, pero ya no aguantaba más esto. Perdóname”.

Ella lo mira con una irreproducible ternura, roza sus manos por su rostro, y le dice: “no te preocupes, nos estaremos hablando. Descansa y cuídate.”.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------
Fue la noche más inesperada para Verónica. Volvía a su casa “repasando” cada palabra de él, aún sorprendida y sin entendimiento alguno.

¿ Podrá derribar "el muro" que ella ha construido y que la detiene frente al mundo?¿Aceptará la cálida y sublime propuesta de amor?

Verónica sufre muerte de amor. Muerte al amor le ha dado.
¿Aceptará "correrse de su ceguera"?

6 comentarios:

Anónimo dijo...

La amistad que cruza una frontera más y se convierte en amor.
A mí me ha pasado últimamente, así que me sentí identificado con tu historia.
Como el valiente protagonista, me atreví a confesarle mis sentimientos a una vieja amiga que se había ganado un poco más mi corazón.
Es curioso que recibiera la misma respuesta de no vamos a perder la amistad, pero hay que poner distancia por el momento.
Así que yo espero que Verónica sea capaz de abrirse el amor y acorte dicha distancia cuanto antes.
¿Habrá tercera parte?
Mientras tanto, seguiré esperando mi turno en la ruleta rusa del amor.
Besos Val.
Me encantó leerte. Hoy especialmente, pues parece que miraste dentro de mí.
Cuídate.

val dijo...

Gracias Ramón por tu comentario!!!

Me alegra mucho poder dejar algo en alguien, con mis relatos.

Y te cuento,que Sí habrá tercera parte!

Besos

Leandro dijo...

Podrá Verónica?
Esto es una novela de Migré!!!

Desde las viejas de Grecia Colmenares que no me sentaba frente a la compu con helado y esperando más...

Entre nosotros, para mi que el amigo la agarra y le pega una &%$&/%$· que la dejá mirando las estrellas...

LO demás... Mmmm... Seguramente después de eso, será más divertido

Beso

Solo Palabras... dijo...

Una historia interesante, aunque a veces cueste bastante sentarse con atención durante tanto texto ante el teclado.
¿Para cuando la tercera?
Besos

Anónimo dijo...

Tengo problemillas para seguir el ritmo en esto del blog. Lo he explicado en mi desván.
Así que quería avisarte para que no vayas a pensar que me olvidé de ti. Ni mucho menos.
Espero volver pronto y que tanto ajetreo termine cuanto antes.
Un abrazo enorme, cuídate mucho y espero que sepas perdonarme.

Mar y Sol(a veces tenue y otras no) dijo...

Hola hola, aquí yo volviendo...también extrañaba esta ventana y mirá qué bueno lo que leí..me quedé un rato pq me puse al día con las dos partes y no se...vaya a saber qué hace Verónica...hay que estar en sus zapatos.
Un abrazo inmenso!!